Pendiente de oro con forma de barco
Tarento , via Umbria | Segunda mitad del Siglo IV a.C.
La creatividad de los orfebres tarentinos, entre el siglo IV y el I a.C. produce joyas sumamente refinadas y de elevada calidad decorativa: el famoso “Oro de Taranto”. En su mayoría halladas en las tumbas, colocadas como elementos del ajuar, las joyas eran objetos personales del difunto, usadas a diario o en ocasiones especiales. Entre los numerosos pendientes, elemento esencial de adorno de la mujer tarentina, hallados en los ajuares funerarios, destaca la difusión del tipo con forma de barco con diferentes variaciones. El ejemplar excepcional de gran tamaño expuesto en el MArTA está decorado con la técnica compleja de la filigrana, de la granulación e hilos grafilados y lisos. El barco está adornado con pendientes y elementos de lámina entallada con forma de figuras femeninas aladas (Nikai) colocadas en los extremos.